Dado que la mordida y la apariencia de los dientes afectan en gran medida nuestra vida diaria,
Se requiere que las fresadoras tengan una alta precisión de mecanizado.
Sin embargo, la precisión de la fresadora en sí no es suficiente para un procesamiento de precisión.
Dos requisitos previos esenciales para mantener la precisión del mecanizado son precisión
"originación de la herramienta/posicionamiento inicial",
Y
"posicionamiento de la pieza de trabajo".
Se refiere a determinar el punto de partida del mecanizado de la herramienta.
Las fresadoras utilizan herramientas ultrafinas con un diámetro de 1 mm o menos para procesar materiales duros, lo que provoca desgaste. El mecanizado con desgaste inesperado o desconchado de la herramienta puede provocar directamente defectos de mecanizado debido a desviaciones dimensionales en el producto terminado. Especialmente al mecanizar continuamente,
es necesario comprobarlo cada vez.
La pieza de trabajo debe sujetarse firmemente para que no se mueva durante el mecanizado.
Si un disco se mecaniza con un accesorio suelto, incluso con un equipo de alta precisión, se producirá un error* en las dimensiones del producto terminado, lo que provocará un mecanizado defectuoso. Esto resulta especialmente importante en el funcionamiento sin supervisión con un cambiador de discos no supervisado por una persona.
*Ejemplo de errores dimensionales
Perforar agujeros en la posición incorrecta
Perforar un agujero que sea más grande que la dimensión.
Perforar un disco en el ángulo incorrecto
Para evitar los riesgos anteriores, es necesario mecanizar la herramienta o el disco determinando con precisión su posición mediante un sensor.
Existe el problema de no tener suficiente espacio para el montaje del sensor.
Muchas fresadoras dentales son pequeñas (tamaño de escritorio) pero están diseñadas para acomodar más barras de fresado, por lo que el espacio de montaje del sensor es limitado. Así que,
Se requiere un sensor compacto que pueda montarse en un espacio limitado.
Si un sensor se daña, el equipo no se puede utilizar hasta que se restablezca, por lo que el sensor también debe ser duradero.
Especialmente, el interior de una fresadora, ya sea seco o húmedo, es un ambiente adverso donde se dispersan virutas finas y líquidos, y los sensores con estructuras de protección débiles corren un alto riesgo de penetración en el cuerpo principal y daños. Los sensores láser sin contacto y los sensores de proximidad no son adecuados para su instalación debido al alto riesgo de falla causado por escombros voladores.
Para mantener la precisión del mecanizado de una fresadora, se deben tener en cuenta varios factores clave:
Configuración y alineación precisas de las herramientas: garantizar que las herramientas estén instaladas y alineadas correctamente es crucial para mantener la precisión. Una alineación inadecuada puede provocar el desgaste de las herramientas y, en última instancia, afectar la calidad del producto terminado. Las inspecciones y alineaciones periódicas son esenciales para garantizar una precisión de mecanizado constante.
Ajuste fino de los parámetros de mecanizado: Los parámetros de mecanizado, como la velocidad del husillo, la velocidad de avance y la profundidad de corte, deben ajustarse cuidadosamente según el material que se procesa y la precisión deseada. La optimización de estos parámetros puede mejorar significativamente la precisión del mecanizado y reducir la probabilidad de errores.
Mantenimiento preventivo regular: el mantenimiento preventivo es clave para garantizar la precisión a largo plazo de la fresadora. Esto incluye lubricar piezas móviles, revisar y apretar pernos y reemplazar componentes desgastados según sea necesario. La limpieza periódica de la máquina, especialmente de las zonas donde se acumulan virutas y polvo, también es fundamental para mantener su rendimiento.
Enfriamiento y lubricación efectivos: el proceso de fresado genera mucho calor, lo que puede afectar la precisión de la máquina si no se maneja adecuadamente. Los sistemas de refrigeración eficaces y la lubricación de piezas críticas son vitales para garantizar que la máquina funcione a temperaturas óptimas y con un desgaste mínimo.